Fragancia floral y afrutada. El frasco, de color verde mar, tiene la mítica forma de los labios que se hicieron famosos por haberlos plasmado, primero en un cuadro y luego en un sofá, el surrealista y universal Dalí en 1936.

La pirámide olfativa se abre con notas de limón, piña, ciruela, mandarina, melocotón, pomelo y frambuesa. En el centro encontramos iris italiano, rosa, jazmín y rosa de Brasil. Finalmente, para cerrar, haba tonka, ámbar, pachulí, coco, almizcle, vainilla, sándalo y cedro. Un aroma intenso sobre todo para la primavera y el verano.